martes, 31 de enero de 2006
GUANGUALÍ
CAPÍTULO 11
"PUNTO ROJO EN VIVO"
OCTUBRE 1999
21: OO APROX
Caía la noche y nosotros figurábamos fumándonos un chancho encerrados en el auto de Jaime cuando pasa una camioneta (típica de campo) (una Chevrolet celeste de los años 60, con ruedas patonas) se nos estaciona al lado y alguien nos hace el gesto que baje la ventana, abrimos y el humo salía como demonios encarcelados rápidamente a perderse en el cielo. Era Marcos que se cagaba de la risa de ver nuestras caras de pez (fuimos lejos los que más fumábamos en el pueblo).
-¿Van a ir?- nos pregunta-
-¿Pa onde? (contesta Jaime con voz de perdido)
-A Qulimarí poh, hoy toca “PUNTO ROJO EN VIVO” (no sé si el grupo solamente se llamaba Punto Rojo y tocaba en Vivo o era así realmente….)- Nosotros vamos todos pa allá, llevamos una caja de pisco ¿Vienen?
Que nos dijeran, inmediatamente Jaime prende el auto y después de unos segundos lo para… -Estoy muy volado pa manejar- La lluvia de papes se hizo notar de inmediato y no tuvo otro remedio que seguir a la camioneta rapidito. La camioneta iba llena de gente en su parte de atrás, de todas las edades y colores. Nosotros cada vez estábamos más intrigados en que consistía este famoso y esperado grupo. En el camino subimos a las doncellas de Guangualí que no cabían en la camioneta y nos explicaron.
PUNTO ROJO EN VIVO era un grupo Sound (era el 99 boom del Sound) de Los Vilos que dejaba la patá en fiesta que tocaban. Al Llegar a Quilimarí lo primero con lo que nos topamos fue con esta “fonda” llamada “La Pastorcita” (que no era ni discoteque, ni galpón, definitivamente era una fonda pero con luces de fiesta y piso de tierra).
Nos bajamos del auto y nos pusimos a tomar un combinado en el estacionamiento del local y nos servíamos el primero cuando por primera vez veo una “cuca” de pacos pasar y estacionarse al lado de nosotros. Nosotros quedamos rígidos ni que viéramos un fantasma (de hecho ni me acordaba de la existencia de estos seres de verde) pero los cabros del pueblo lejos de urgirse los saludan como amigos de toda la vida.
-Este es de Guangualí – Decía Joselito presentándonos a un paco de ojos rojos y sonrisa floreciente, pero típica gente de campo no habla mucho y se van luego. Después de varias piscolas afuera y ya medios entonados decidimos entrar… la entrada costaba $500 con cerveza. (Me acuerdo que pasé como $345 porque no tenía más) ((EstuPiante en esa época))
En total éramos unas 30 personas (niños, jóvenes, adultos, viejos de todo) pasamos el dinero y entramos, nos sentamos todos en una mesa armada con varias mesas pequeñas cuadradas de color celeste al lado del escenario. Aparece una señora del local que pregunta cuántos somos… ¡32! grita alguien, la señora toma nota y se va, había un grupo folclórico amenizando por mientras. Vuelve a aparecer la señora con dos huasos que traían 3 javas de cervezas de ¾ (que vendrían a ser el cover de la disco) ((casi se me cae la mandíbula de la impresión)). Cada uno cerveza en mano, esperamos a que anuncien el grupo revelación del momento….
“Señoras y señores, desde la hermosa ciudad de Los Vilos toda la magia y el ritmo de….¡PUNTO ROJO EN VIVOOOOO!”
Comienza a sonar el inconfundible sonido del Sound en manos de un grupo de unas 12 personas, de los cuales tres eran bailarines y el resto orquesta en un escenario que no superaba los 6 x 2 metros, todos vestían de rojo con lentejuelas plateadas y usaban el pelo largo recién mojado. Independiente de lo apretado que estaba el grupo los tres bailarines cantantes se las ingeniaban para hacer todo tipo de piruetas, patadas al aire y movimientos propios de la Tirana, yo estaba atónito y perplejo viendo este freak show cuando me jalan del brazo y una Lola me lleva a ponerse los dancing a la pista que inmediatamente estaba llena desde que empezaron a tocar. Yo estaba cagado de la risa bailando y le pregunto a Lorena (con la que bailaba) “¿Oye después ponen otro tipo de música cierto?” La mina se rie y me pregunta "¿Acaso ustedes bailan música embasada?” (¿¿¿¿¿¿??????)
lunes, 23 de enero de 2006
GUANGUALÍ
CAPÍTULO 10
"EL CLÁSICO"
OCTUBRE 1999
SÁBADO 17: 30
Ya con mi mano vendada volvimos a nuestro pseudo campamento, el cual estaba lleno de gente instalándose con parrilla, cajones de tomate, cartas españolas, garrafas, candongas, chuiscas o damajuanas; en torno a la cancha que se encontraba al lado de las carpas ya que se preparaba el clásico de clásicos "GUANGUALÍ v/s LOS VILOS" en su rama femenina. Fuimos a comprar más cervezas y nos instalamos entusiasmados para ver el partido (acuérdense que figurábamos de entrenadores el día anterior). El equipo de Los Vilos también había traído su buena barra compuestas por viejas gordas escandalosas que animaban a sus niñas a punta de chuchadas, las mozas de Los Vilos eran unas bestias gigantes en comparación a los pajaritos locales, incluso algunas de ellas que me hicieron dudar de su genero, ya que una tenía un prominente bigote. Como buena barra brava nos sacamos un infaltable canuto y.... (17 minutos perdidos). Pitazo inicial y empezó el partido, un desfile de patadas y porrazos terribles (si nosotros pensábamos que la sufrimos cuando jugamos con las lolas, las bestias de los Vilos eran peor) ((yo en mi volada escuchaba un tema de Beethoven a lo más "Naranja Mecánica" mientras presenciaba la masacre)), primero uno, a los 5 minutos después el segundo de las bestias (las guatonas celebraban con escándalo golpeando ollas.) Nosotros nos encontrábamos al lado de la cancha y una pelota que se escapa, las gladiadoras salen a perseguirla, la pelota se acerca a nosotros y las dos lolas caen encima de nosotros. Todos riéndose en mala pensando se habían tirado apropósito, yo quedé medio aturdido.... Bueno, siguió el partido (masacre) cono uno que otro gol de Los Vilos. El primer tiempo terminó como 8-0 a favor de las visitantes, y ya pal segundo tiempo fue peor... pero lejos de molestarse y achacarse las lolas se sentían bien por haber hecho un buen partido... apenas terminó 3 de las lolas se nos acercaron a pedirnos cerveza para la sed, una de ellas nos pregunta que qué íbamos a hacer a la noche, nosotros obviamente no teníamos ni idea, y Nano pregunta ¿Por qué? ¿qué hay? y ellas contestan ... PUNTO ROJO EN VIVO. (¿¿¿¿¿?????)
lunes, 9 de enero de 2006
GUANGUALÍ
CAPÍTULO 9
“EL CABALLO DE VENENO”
OCTUBRE 1999
SÁBADO 14:06
En el improvisado campamento que armamos (como había sido de noche cuando acampamos, no nos dimos cuenta de donde nos habíamos instalado) era un pequeño parque con una cancha de fútbol y unos árboles con forma de cogollos gigantes (dato que me lo recordaron Nano y Jaime). La gente se acercaba a la cancha y armaban un asado en torno a ella ya que en un rato más jugaba la selección femenina de Guangualí junto a su homónima de Los Vilos, nosotros terminábamos de almorzar unos energéticos tallarines con chela cuando aparece el Veneno cabalgando un caballo y con una cuerda llevaba otro enlazado al cuello. Yo, que estaba volado como chancho no me pude resistir a montar el caballito, me subo (sin montura, sólo un lazo amarrado al cuello) JEJEJEJE que bonito el caballito, Cachureos saca la cámara comienza a grabar (me acuerdo de la sonrisa que tenía en ese momento) hasta que de repente un grito ¡HEY! Y veo al Veneno galopando a 100 Km/h, acto seguido (son caballos de carrera a la chilena)((¡PENDEJO DE LOS MIL DEMONOS!)) el mío se dispara y corre embalado y yo sin haber galopado en mi vida, trato de frenar el caballo con la cuerda pero va tan rápido q ni siquiera le puedo doblar el cuello sólo consigo quemarme las mano en mala onda, en cosa de segundos veo que está entrando al camino de tierra y piedras que daba al pueblo entonces sin pensarlo más me lanzo a la nada, para mi mala suerte no caigo para el lado como esperaba sino que me voy directamente a las patas del caballo, cayendo con el hombro y parte de la espalda, se crea una polvadera instantánea y yo trato de levantar la cabeza y en ese segundo las patas del caballo me pasan rozando la cabeza (si me hubiesen rozado no estaría escribiendo este blog).
El caballo siguió descarrilado y yo me levanto como pude, mis amigos lejos de ayudarme estaban recagados de la risa filmando todo, hasta que vieron mi mano que estaba toda quemada por la cuerda. Trate de desempolvarme un poco y fuimos al pool a ver si sabían de alguien que me curara, entonces del pool nos indicaron una casa donde vivía un paramédico (era un pueblo demasiado pequeño, no había ni policías ni médicos) Me abre la puerta un gordito de lentes que estaba evidentemente chino, me hace pasar me limpia la mano, me la desinfecta y me las venda con una gaza todo bien, impecable. Termina de hacer su curación y yo le pregunto cuanto le debía, el se rió y me dijo que no me preocupara. Yo le insistí y le pasé lo que tenía en mi billetera en ese momento que eran como dos lucas. Nos despedimos y volvimos al campamento. Con mis amigos descubrimos que era una especie de prueba que nos querían hacer, yo pensaba que era sólo una jugarreta de un pendejo venenoso.
CAPÍTULO 9
“EL CABALLO DE VENENO”
OCTUBRE 1999
SÁBADO 14:06
En el improvisado campamento que armamos (como había sido de noche cuando acampamos, no nos dimos cuenta de donde nos habíamos instalado) era un pequeño parque con una cancha de fútbol y unos árboles con forma de cogollos gigantes (dato que me lo recordaron Nano y Jaime). La gente se acercaba a la cancha y armaban un asado en torno a ella ya que en un rato más jugaba la selección femenina de Guangualí junto a su homónima de Los Vilos, nosotros terminábamos de almorzar unos energéticos tallarines con chela cuando aparece el Veneno cabalgando un caballo y con una cuerda llevaba otro enlazado al cuello. Yo, que estaba volado como chancho no me pude resistir a montar el caballito, me subo (sin montura, sólo un lazo amarrado al cuello) JEJEJEJE que bonito el caballito, Cachureos saca la cámara comienza a grabar (me acuerdo de la sonrisa que tenía en ese momento) hasta que de repente un grito ¡HEY! Y veo al Veneno galopando a 100 Km/h, acto seguido (son caballos de carrera a la chilena)((¡PENDEJO DE LOS MIL DEMONOS!)) el mío se dispara y corre embalado y yo sin haber galopado en mi vida, trato de frenar el caballo con la cuerda pero va tan rápido q ni siquiera le puedo doblar el cuello sólo consigo quemarme las mano en mala onda, en cosa de segundos veo que está entrando al camino de tierra y piedras que daba al pueblo entonces sin pensarlo más me lanzo a la nada, para mi mala suerte no caigo para el lado como esperaba sino que me voy directamente a las patas del caballo, cayendo con el hombro y parte de la espalda, se crea una polvadera instantánea y yo trato de levantar la cabeza y en ese segundo las patas del caballo me pasan rozando la cabeza (si me hubiesen rozado no estaría escribiendo este blog).
El caballo siguió descarrilado y yo me levanto como pude, mis amigos lejos de ayudarme estaban recagados de la risa filmando todo, hasta que vieron mi mano que estaba toda quemada por la cuerda. Trate de desempolvarme un poco y fuimos al pool a ver si sabían de alguien que me curara, entonces del pool nos indicaron una casa donde vivía un paramédico (era un pueblo demasiado pequeño, no había ni policías ni médicos) Me abre la puerta un gordito de lentes que estaba evidentemente chino, me hace pasar me limpia la mano, me la desinfecta y me las venda con una gaza todo bien, impecable. Termina de hacer su curación y yo le pregunto cuanto le debía, el se rió y me dijo que no me preocupara. Yo le insistí y le pasé lo que tenía en mi billetera en ese momento que eran como dos lucas. Nos despedimos y volvimos al campamento. Con mis amigos descubrimos que era una especie de prueba que nos querían hacer, yo pensaba que era sólo una jugarreta de un pendejo venenoso.
miércoles, 4 de enero de 2006
GUANGUALÍ
CAPÍTULO 8
"¡QUE DESPERTARSSS!"
OCTUBRE 1999
SÁBADO 12:23
¡Dolooooooooooor! ¡Me tiran las orejas! (Inmediatamente se me vienen recuerdos de profesoras y tías que por pura represión, alguna vez lo hicieron) trato de abrir los ojos, siento sabor de tierra en la boca, manchas de luz, me duelen los ojos seguramente los tengo hinchados. ¡AAAAAAAAAAAAHHHHH! Un nuevo tirón de orejas esta vez más fuerte que el anterior me hace levantar la cabeza de súbito y lo primero que veo es a este endemoniado animal que trata de alimentarse con mi lóbulo. (Imagínense lo que es despertar con una caña inimaginable y ver la cara enajenada de este plumífero)
Le pego un aletazo y trato de levantarme (tengo la mitad del cuerpo afuera de la carpa seguramente traté de salirme en la mañana pero no pude cumplir mi comitiva) Me paro como pueda, me sacudo y ayudo a ordenar un poco el kaos que habíamos dejado. El resto de los cabros en medio de quejidos también se levantaban (todos fueron despertados por mi grito) Siento el cuerpo como si me lo hubieran molido con un tenedor gigante y mi cabeza como un florero roto. ¡Vamos por una cerveza antes de que sea demasiado tarde! Así figurábamos yendo a comprar una chela cochino y con cara de orto, pero había caña y calor ¿qué más se podía hacer? ¡Pos claro! ¡Un mañanero!
CAPÍTULO 8
"¡QUE DESPERTARSSS!"
OCTUBRE 1999
SÁBADO 12:23
¡Dolooooooooooor! ¡Me tiran las orejas! (Inmediatamente se me vienen recuerdos de profesoras y tías que por pura represión, alguna vez lo hicieron) trato de abrir los ojos, siento sabor de tierra en la boca, manchas de luz, me duelen los ojos seguramente los tengo hinchados. ¡AAAAAAAAAAAAHHHHH! Un nuevo tirón de orejas esta vez más fuerte que el anterior me hace levantar la cabeza de súbito y lo primero que veo es a este endemoniado animal que trata de alimentarse con mi lóbulo. (Imagínense lo que es despertar con una caña inimaginable y ver la cara enajenada de este plumífero)
Le pego un aletazo y trato de levantarme (tengo la mitad del cuerpo afuera de la carpa seguramente traté de salirme en la mañana pero no pude cumplir mi comitiva) Me paro como pueda, me sacudo y ayudo a ordenar un poco el kaos que habíamos dejado. El resto de los cabros en medio de quejidos también se levantaban (todos fueron despertados por mi grito) Siento el cuerpo como si me lo hubieran molido con un tenedor gigante y mi cabeza como un florero roto. ¡Vamos por una cerveza antes de que sea demasiado tarde! Así figurábamos yendo a comprar una chela cochino y con cara de orto, pero había caña y calor ¿qué más se podía hacer? ¡Pos claro! ¡Un mañanero!
martes, 3 de enero de 2006
GUANGUALÍ
CAPITULO 7
"¿AH?"
MES:???? AÑO:???
DÍA:????? ¡HORA!:???
Cuando uno fuma Marihuana tan poderosa en un improvisado bong, primero sientes como se llenan tus pulmones y luego como súbitamente sube a la cabeza y si aguantas el humo (para quedar más volado aún) te explota la cabeza saliendo el humo por ojos, orejas, nariz, boca y ciertos poros (por golozo) pero la reacción es instantánea y letal.
Debo decir que me es muy difícil poder relatar los sucesos que ocurrieron después de esa última fumada, me acuerdo de un bailoteo en la fogata al ritmo del Sound Sound Sound!, canturreos varios y hubo hasta un romantiqueo por ahí… bueno después de agotar todo recurso alcohólico habían ya varios caídos en batalla sobre todo nuestros anfitriones, y tres de nosotros aún con un concho de vino rancio en la mano ya de amanecida se nos ocurre fumarnos un submarino (o saumerio) ((si lo conocen por otro nombre favor postear)) Después de los 15 minutos mínimos para toser ya esto era una cosa de alucinaciones sin sentido manchas de colores que te atacaban y uno para hacerle el quite y espantarlas termina pegándole una cachetada a tu más cercano, que se pica y te devuelve el golpe, acto seguido se forma un juego de manos y risas que hace soltar los fierros de la carpa (era una carpa liviana de esas que se arman solas) Jamas nos dimos cuenta que la carpa estaba como un una pendiente y con la euforia del momento rodamos cuesta abajo como unos 20 metros…. (fade out)… (continua)
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